El equipo de la capital alemana mantuvo el invicto y ahora suma 44 puntos y sigue, con comodidad, como el líder de la Bundesliga
El Hamburgo dio una gran batalla frente al Bayern, uno de los mejores equipos del mundo, pero no pudo evitar que los de Münich, claramente superiores, se quedaran con el triunfo 3-1 en el Allianz Arena. Tomás Rincón estuvo en cancha durante todo el partido, con la novedad de que cubrió el lateral diestro.
Conscientes de que el rival es reconocido, entre otras cosas, por su explosividad ofensiva por las bandas, el director técnico Bert van Marwijk planteó un esquema que intentaba oponer resistencia. Entre los cambios, el venezolano pasó a custodiar el costado derecho, aunque –por momento- la visita se protegía con una línea de cinco hombres.
Aunque los dirigidos por Josep Guardiola dominaban, no encontraban descifrar el muro que construyó la escuadra del criollo, quien jugó con notable intensidad y no desentonó en todo el cotejo. Pero al 42’ la pared sería derribada, cuando Mario Manzukic logró rematar un centro desde la banda izquierda y la mandó a guarda.
Poco después de iniciado el complemente, Mario Götze amplió la ventaja con un golazo: Recibió el balón de espaldas al arco y rápidamente se giró para empalmar la volea y clavar el 2-0. Los del tachirense buscaron descontar en contragolpes y al 87’ lo conseguirían. Marcell Jansen se escapó por el sector izquierdo y centró raso para Pierre-Michel Lasogga, quien mandó un misil que perforaba la meta protegida por Manuel Neuer.
La chispa de esperanza se encendió para Hamburgo, pero el suizo Xerdan Shaqiri se encargó de apagarla, con una anotación en los últimos segundos del compromiso. El equipo de la capital alemana mantuvo el invicto y ahora suma 44 puntos y sigue, con comodidad, como el líder de la Bundesliga.

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